Hasta hace 10 años el PAN representó para los tamaulipecos la única opción real para cambiar el futuro del estado, pero la falta de preparación de sus políticos, la imposición de candidatos y su desmedida ambición los llevaron al fracaso y a seguir los pasos del PRI hacia la tumba política.
De nada le sirvieron sus derrotas porque continúan cometiendo los mismos errores y lo peor es que mantienen activos “a los mismos de siempre” que son los que han llevado a este partido político a perder la credibilidad y confianza de la ciudadanía.
Esto se debe a la falta de renovación y preparación de cuadros; a la ausencia de un reglamento interno que establezca una serie de requisitos para ser candidatos o dirigentes y contar con una vocación social y política que sea reconocida por la militancia y la misma sociedad.
Sin duda que este es uno de los mayores problemas que el PRIANISMO tiene para superar, pero no lo conseguirá mientras la oligarquía partidista siga teniendo el control de ambos partidos y será e inevitable que sigan cayendo en la preferencia de los electores.
Por ejemplo, en el PRI prefirieron darle la diputación plurinominal a Paloma Guillén quien estuvo en el Congreso de Tamaulipas hace casi 40 años y esto podría indicar que no hay nuevos cuadros de priistas que ocupen esa posición legislativa.
Sin embargo, sí existen, pero es la oligarquía partidista la que domina al PRI y no le interesa renovarse para seguir colocando a sus cómplices, amigos y compadres. Esto no quiere decir que Paloma sea una ineficiente legisladora, pero ya chole lleva 40 años cerca del poder y no la baja lo cual resulta inconcebible, pero cierto.
Valdría la pena revisar su historial para saber cuáles son los resultados que le ha dado a Tamaulipas y nos daríamos cuenta que realmente son nada, es por esto que los ciudadanos están desanimados y frustrados en participar con el PRI por lo que se espera que en la próxima elección por fin desaparezca.
El PAN no canta mal las rancheras y de todos los diputados locales que estarán en el Congreso sólo Pepe Schekaibán ganó la elección constitucional y los demás son plurinominales que representan a los mismos de siempre.
Lo cual es más que evidente que el cacique del PAN, Francisco García Cabeza de Vaca, fue quien los eligió y por supuesto que esto mismo hizo con los regidores pluris en todo el estado dándole preferencia a su familia por encima de la militancia.
Aunque en el caso de su hermano Ismael vaya susto que le pegaron los morenistas con la reforma que les permite a las autoridades de la Fiscalía –federal o estatal- detener a algún diputado electo -antes de entrar al pleno del Congreso- si es que tienen alguna acusación pendiente.
Por eso, con anticipación a los nuevos legisladores se les pidió que sacaran su credencial para entrar al recinto principal del Congreso, pero Ismael se negó asistir, ya que no sabía si este cambio en el reglamento interno traía alguna amenaza velada.
De tal manera que fue tal el miedo que lo invadió que impugnó la reforma ante el TRIFE y le saliófavorable, pero ni así fue por su credencial y es que entendemos que aún no se repone del susto que le dieron, porque ahora hasta se llama así mismo perseguido político y asegura que lo quieren callar cuando en realidad ni habla ni hace nada y cuando lo hace, dice incoherencias y todo lo echa a perder.
En fin, sí los representantes populares de MORENA no se activan en territorio y siguen creyendo que la gente los sigue porque los convencieron y los hicieron ganar por sus mensajes y propuestas, es mejor que no lo crean porque esos votos y esa militancia morenista es totalmente ficticia.
Lo mejor es que se pongan a trabajar cerca de la gente, que traten de cumplirles porque cuando el gobierno federal deje de pagarle a los beneficiarios de los programas sociales, es seguro que los perderán, será difícil que los vuelvan a convencer y les pasará lo mismo que al PRIAN. Ni más ni menos.
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