Ahora sabemos que a la Contralora Gilda Cavazos Literas se le pasó supervisar y auditar el trabajo que realizan los comisionados del Instituto de Transparencia y Acceso a la Información de Tamaulipas (ITAIT), ya que los diputados locales los volvieron a ratificar en sus cargos.
Y es que desde hace tiempo y diversos organismo de la sociedad, ciudadanos y medios de comunicación, han reprobado su trabajo, y este ha sido, y es, muy cuestionado, porque al final de cuentas quien queda mal es el gobernador Egidio Torre Cantú, ya que el ITAIT no está rindiendo cuentas claras, ni mucho menos transparentes.
Esto parece muy extraño, porque la Contralora Cavazos es una técnica muy calificada, con fama de honesta y muy transparente, y hasta nos han llegado a decir que no se le pasa nada, y siempre está al pendiente de todas las irregularidades para solventarlas e imponer castigo a quien las cometa.
Sin embargo, en esta ocasión parece que cometió un error por no enviar las calificaciones del trabajo que realiza el ITAIT, y no sabemos si este error lo cometió primero con su Jefe el gobernador del estado, ya que al desconocer a fondo la actuación de los comisionados, envió la iniciativa que los ratificó al Congreso de Tamaulipas.
O por otra parte, la Contralora se equivocó con los diputados locales, quienes al desconocer las negativas evaluaciones que saca el ITAIT, cada vez que lo evalúan, los legisladores los volvieron a ratificar cuando en realidad, merecían que los dieran de baja por ser tan incapaces.
En fin, la Contralora Gilda Cavazos Literas seguramente tendrá que rendirle un informe detallado al gobernador, del porqué el Congreso volvió a ratificar a estos comisionados, si no lo hace, es seguro que el ITAIT seguirá siendo un elefante blanco, pero muy oscuro. Ni más ni menos.
Cambiando de tema. Armando López Flores, presidente municipal de Altamira, dará de baja de la nómina a más de cinco colaboradores de primer nivel, debido a que unos, abusaron de la confianza que les otorgó, y otros, perdieron el entusiasmo por trabajar.
Esto habrá de suceder en los próximos días y es posible que esto cause muchas sorpresas, pero la limpia municipal por el bien de Altamira y por tener funcionarios más comprometidos con el actual proyecto municipal.
Y bueno, ya que hablamos de Altamira, a nuestro amigo Armando Juárez le enviamos nuestro más sentido pésame por el fallecimiento de su señora madre y esperamos que tenga una pronta recuperación espiritual.
Para finalizar, el diputado Heriberto Ruiz Tijerina, delegado del PRI en Tampico, parecería que es un
político muy incapaz para llevar a cabo el proceso de renovación del dirigente del PRI en el puerto, ya que le permite al diputado local, Lalo Hernández Chavarría, hacer campaña con los consejeros para tratar de imponer al doctor Luis Miguel Rodríguez González, lo cual está dividiendo al priismo de Tampico.
Sin duda que la falta de oficio político que Heriberto Ruiz Tijerina está demostrando para controlar este tipo de situaciones, le podría costar que el PRI estatal, lo regrese a Victoria para que vuelva a sentarse en esa mohosa silla del Movimiento Territorial, de donde es eterno dirigente.
Al cierre. El alcalde Gustavo Torres Salinas, acaba de dar una buena noticia para Tampico, ya que el gobernador Egidio Torre Cantú y la Secretaria de Salud del gobierno federal, Mercedes Juan López, encabezarán este jueves en el puerto, la ceremonia de inicio de los trabajos de construcción del nuevo Hospital General Dr. Carlos Canseco, obra que beneficiara a habitantes del sur de Tamaulipas y las huastecas y tendrá una inversión superior a los 934 millones de pesos.
Con esto el presidente de la República, Enrique Peña Nieto, cumple un compromiso de campaña y el compromiso de satisfacer la demanda de atención hospitalaria de la zona conurbada, el norte de Veracruz y el poniente de San Luis Potosí e Hidalgo, al convertir al nosocomio Dr. Carlos Canseco en el hospital más grande y moderno de la entidad, por su capacidad para proporcionar servicios de prevención y cuidado de la salud a más de 760 mil habitantes. ¿Qué tal, eh? Por fin, se cumplió un sueño añorado.
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