Sin embargo, los tres gerentes de la COMAPA que estuvieron en el sexenio pasado no son los únicos que le dejaron esta herencia de la que habla “Paco Pepe” porque siempre ha existido, pero se desbordó en la época de los gobiernos neoliberales: de Cavazos a Cabeza.
Son 30 años de evidente corrupción: irregular manejo de los recursos; obras asignadas a cómplices y socios de gerentes, amigos y parientes de gobernantes, así como la autorización de altos sueldos que los gerentes asignaban a su personal de confianza de acuerdo a “los servicios” que les prestaban.
Es decir, la COMAPA Sur era la joya del gobernador en turno, durante la época neoliberal. Desde ahí proyectaron a quienes podían ser candidatos a alguna posición electoral o cómplices para hacer negocios con la construcción de obras, reparación de calles, venta de productos químicos. para limpiar o potabilizar el agua, entre otros muchos más.
Aunque habríamos que comentar que la venta de agua siempre resultó el mejor negocio, ya que se obtuvieron las mejores ganancias y, por ejemplo, muy poca gente sabe que el agua que se enviaba desde Tampico hacia Altamira se cobraba por una cierta cantidad en centavos, pero a finales del periodo neoliberal, la subieron considerablemente en pesos y esto les representó ganancias exorbitantes.
Lo extraño del caso es que durante esta época nunca se reportaron esas ventas de agua al Consejo de Administración y supuesto, que los gerentes al terminar en su cargo se iban a sus casas a disfrutar de todo lo que se habían ganado o mejor dicho todo lo robado. Pero lo mejor de todo es que casi nunca nadie se daba cuenta.
Por eso, muchos querían la COMAPA Sur más que ser diputados o presidentes de Tampico o Ciudad Madero y en especial cuando en el 2013 a través de un decreto sacaron a los empresarios del Consejo de Administración y se quedaron solo con el representante de la Cámara Nacional de la Industria de la Construcción.
De esta manera excluyeron a los representantes sociales y al sector productivo de Tampico y Ciudad Madero del máximo organismo de dirección, supervisión, control y decisión, que aún tiene la COMAPA Sur.
Así los comerciantes, obreros y sociedad organizada, quedaron fuera por un decretazo en el 2013 y en su momento, dijeron que era suficiente para representar a la gente con uno de los diputados locales, ya que son los representantes populares.
Lo interesante es que ampliaron la relación de representantes del sector público y los integraron al Consejo de Administración como al Rector de la UAT a quien hicieron presidente del Consejo; al director de la CEAT, Secretaria de Finanzas; Secretaria de Salud y por supuesto que dejaron a los alcaldes de Tampico y Ciudad Madero.
Sin duda que buscaron que los mismos funcionarios estatales actuaran también como sus cómplices en la COMAPA Sur, donde estaba el borbotón no precisamente del agua potable, sino del dinero que genera esta entidad pública descentralizada del gobierno de Tamaulipas.
Pero bueno, hay muchas historias en la COMAPA Sur de cómo un político, empresario o primo de gobernador, de repente siendo gerente general sale siendo millonario después de haber sido casi toda su vida un pobre y humilde ciudadano.
Por eso creemos que Francisco José “Paco Pepe” González Casanova tiene razón cuando quiere poner orden, pero no es integrando un patronato o consejo de empresarios, no, no es por ahí, creemos que únicamente lo que debe hacer es integrarlos al Consejo de Administración.
Así como también a los representantes obreros, a los organismos de la sociedad como las cámaras de comercio, a los maestros, colonos porque es el lugar de donde nunca debieron salir.
Y, además, si quiere acabar con la herencia maldita de la corrupción que dejaron los gobiernos del neoliberalismo, eso es más fácil, póngase de acuerdo con el sindicato, haga que trabaje el Comisario al máximo, al Gerente Administrativo y Comercial y si no le gusta cómo trabajan cámbielos y supervise todo lo que aprueben en compras, lo que ingrese diariamente en caja y no genere más burocracia. ¡Ah! Acabe con los aviadores porque son peores que las fugas de agua que hay por toda la ciudad.
Claro que antes de hacer cualquier cambio, será importante que hable con la diputada Úrsula Patricia Salazar Mojica para que elaboren una propuesta y cambien la integración del Consejo de Administración de la COMAPA Sur, ya que eso solamente lo aprueba el Congreso.
Y por supuesto, que tendrá que hablar con el gobernador Américo Villarreal Anaya, quien debe aprobar estos cambios con los cuales es casi seguro que esté de acuerdo porque, al igual que Paco Pepe, quiere acabar con los vicios añejos que le dejaron los gobiernos del neoliberalismo en la administración estatal. ¿Verdad?...
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