Una de las acciones más perversas que Andrés Manuel López Obrador realizó al llegar a la presidencia de la República, fue ampliar los programas sociales que regalan dinero a la gente, para que los beneficiarios de esos programas del gobierno federal, formaran la estructura política de MORENA.
A partir de ahí y con su lema “primero los pobres” MORENA ha ganado elecciones por todo el país, pero este lema mejor debería de ser “primero los electores” debido a que los beneficiarios de estos programas son utilizados por AMLO para afianzar su proyecto político.
Por ello, tiene altos niveles de aceptación en las encuestas, no hay nadie quien le gane, pero lo que millones de mexicanos no se han dado cuenta es que Andrés Manuel López Obrador de manera cruel y abusiva los utiliza para seguir estableciendo la 4T en el país.
El mismo AMLO ha dicho que los beneficiarios de los programas sociales son la estrategia política electoral de MORENA y así continuar en el poder presidencial lo cual lo hacen quienes pretenden convertirse en dictadores, ya que utilizan a los ciudadanos para sus fines políticos.
Esto mismo lo hace el doctor Américo Villarreal Anaya cuando dice:
“Seguimos con toda convicción la política social del presidente Andrés Manuel López Obrador, que señala “por el bien de todos, primero los pobres”, porque de ahí obtendremos la unidad y las fortalezas para que la transformación que ha llegado a Tamaulipas perdure y cumpla cabalmente con lo que todas y todos esperamos de ella”. ¿Qué tal eh?
Y nos demuestra que al llegar al gobierno de Tamaulipas muy rápido perdió la memoria cuando comenta que:
La transformación en Tamaulipas camina por la vía de la recuperación, de la reorganización y llamando al humanismo y a la justicia social para que nadie se quede atrás y agregó, “se acabaron los tiempos en que los beneficios sólo eran para unos pocos.”
Desde luego que Américo, el gobernador, cuando dijo esto no se contó en este grupo de privilegiados y mucho menos pensó que sus hijos algún día lo fueron, pero no fue así, ya que siendo familiares de un ex gobernador priista siempre fueron de las familias privilegiadas.
Y ahora Villarreal Anaya nos sale que es muy humanista y dice que “por el bien de todos, primero los pobres”, cuando hay tamaulipecos que recuerdan que, siendo director del Hospital General de Ciudad Victoria, ordenaba sacar a los enfermos terminales de los cuartos, para que entraran otros que podían pagar y tener una atención especial.
Desde luego que hay muchas historias de su comportamiento que luego les platicaremos, pero ahora critica a quienes fueron por décadas privilegiados por los gobernadores en turno como es su caso y gracias a ello, llegó a ser subsecretario de Salud por ese privilegio que siempre tuvo en su larga carrera burocrática.
Américo asegura que en Tamaulipas se acabaron los tiempos de los conflictos y envidias, pero esto nunca se terminará, es parte del ser humano, y más si continúa teniendo a su familia en los primeros niveles del gobierno, a su hijo manejando la política y las finanzas de la administración estatal e imponiendo las obras prioritarias que, según su criterio, le convienen al estado, por lo que nuca los conflictos y las envidias terminarán.
Así que todo esto promueve la ambición y otros quisieran estar en su lugar, pero si quiere realmente cambiar y transformar, debería acabar con el nepotismo en su gobierno, que eso es corrupción, así como ser transparente con lo que gasta, por ejemplo, en los pozos profundos que no han tenido éxito y creemos que ni lo tendrán, porque si esta fuera la solución, su padre el ingeniero Américo Villarreal Guerra lo hubiera hecho. Así de simple.
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