Por ello salir a votar el día señalado es importante, de ello depende el futuro del país, estado y municipios, es la oportunidad de aprobar o reprobar lo que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador hizo en este sexenio.
En especial lo realizado en el sur y sureste de México donde invirtió más de la mitad del dinero federal y afectó a la mayoría de los estados del país, a Tamaulipas y sus municipios, pero no le preocupó:
Hizo sus caprichos: el tren que se descarrila a cada rato, la refinería que no produce ni una gota de gasolina y el aeropuerto que no tiene vuelos.
De igual manera perjudicó a los agricultores de la frontera norte al quitarles el agua para sembrar alimentos y se la dio a Nuevo León para llenar una laguna que sirve para promover el turismo.
López Obrador nunca consultó está decisión con los agricultores o con los alcaldes de la zona y fue una acción autoritaria, unilateral y antidemocrática que sólo benefició a su gobierno, a MORENA y a Nuevo León.
Ante esta arbitrariedad, el gobernador Américo Villarreal Anaya nunca le dijo nada, no defendió a los tamaulipecos ni le hizo un reclamo ni exigencia para que devolvieran el agua. Esta decisión única y personal de López Obrador la tuvo que apoyar porque le guarda agradecimiento, lealtad y obediencia por haberlo convertido en gobernador.
Por cierto, Mónica, la hermana del gobernador y orgullo de su nepotismo y corrupción, quien es la candidata de MORENA en Tampico, ha puesto a trabajar al consejo de ancianos para que traten de convencer -engañar- a los regidores de la planilla que registró Rosa González la candidata del PAN y les andan ofreciendo las perlas de la Virgen.
Esto no es nuevo, AMLO lo hizo para llegar a la presidencia de la República es una escuela que les deja a sus seguidores y candidatos peje-zombis.
La estrategia es ofrecer el cielo, la luna y las estrellas, pero de todo eso no les darán más que pura saliva. En MORENA así se las gastan y si se dejan engañar, nunca les cumplirán.
Eso mismo hizo Américo Villarreal cuando fue candidato al gobierno de Tamaulipas y luego, cuando ya que ganó, nunca cumplió y cuando lo hacía, envía a su hijo Ameriquito quien ofrecía puestos de cobrador de rentas, veladores, barrenderos o choferes, en especial a quienes le habían ayudado a ganar.
Así AVA se deshizo de sus “compromisos” de campaña, sabía que solo tenía que cumplirle a AMLO y a quienes les financiaron su campaña, ellos sí merecían su atención y así sucedió. Casi todos están en la nómina o haciendo negocios al amparo del poder.
Por ello, si usted está en la planilla de síndicos y regidores de Rosa González, la candidata del PAN a la presidencia municipal de Tampico, y le tocan a su puerta diciéndole que le va a ir mejor si se cambia a MORENA, ni lo piense, dígales que no, porque no le van a cumplir así lo han hecho y como les ha funcionado lo seguirán haciendo.
De salida. Por cierto, en la Cámara de Diputados aprobaran que el gobierno administre los recursos de las afores que son de los trabajadores y son más de 40 mil millones de pesos. Es un robo en despoblado a todos los trabajadores mexicanos, pero ya es tiempo que la gente se dé cuenta que son una bola de bandidos que se disfrazan de políticos y se dicen ser muy humanistas, pero realmente son vulgares ambiciosos como decía AMLO antes de manejar el presupuesto federal a su antojo y sin que nadie le diga nada. ¿Qué tal?...
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