En Tamaulipas existen muy pocos grupos que actúan en el escenario de la política, que son reconocidos por su trabajo de organización en la ciudadanía, por su permanencia en el panorama de la política y porque siguen peleando por una posición electoral.
Se distinguen por incorporar e impulsar nuevos actores a la política, por su habilidad para negociar posiciones, jugosos contratos de obras y negocios, y aunque en ocasiones se perciba que pierden, nunca lo hacen, porque dependiendo de los candidatos que el PRI estatal imponga, estos grupos pueden manipular a sus seguidores para que participen con el PAN o PRD si es que los candidatos priistas no les convienen a sus intereses.
Uno de estos grupos es el que representa Oscar Luebbert Gutiérrez en Reynosa quien pudo en su momento crecer a nivel estatal al impugnar la candidatura de Geño Hernández Flores, porque este aún no cumplía los diez años de militancia que exigía el PRI para ser candidato al gobierno del estado, pero se calló y no hizo nada porque Tomás Yarrington Ruvalcaba es seguro que le hizo una propuesta que no pudo negarse a aceptar.
Así que este grupo aparentemente perdió pero no fue así, ya que después muchos de sus integrantes obtuvieron cargos administrativos en el gobierno del estado y Oscar volvió a ser alcalde y con ello se pudo consolidar económicamente, se fortaleció y volvió a negociar con Geño Hernández su apoyo a Rodolfo Torre Cantú quien fue el candidato del PRI al gobierno del estado, y aunque el escenario político ha cambiado mucho desde aquel entonces, es seguro que pronto le llegue una parte de su pago.
Otro de los grupos que se mantienen con influencia dentro la política es el que encabeza Lupe González Galván en Madero quien ha utilizado su influencia para ubicar a sus principales seguidores en posiciones claves dentro de la administración estatal y en el municipio.
Esto desde luego que lo ha fortalecido en el escenario de este municipio y es tal su predomino que hasta los mismo petroleros se acercan a él para negociar su apoyo político porque sabe que de no hacerlo, pudieran perder la próxima elección, así pasó cuando Sergio Posadas Lara le ganó a Jaime Turrubiates Solís la alcaldía, cuando este último participó por Acción Nacional y quedaron a 400 votos de diferencia.
Y ahora sabemos que el diputado Esdras Romero Vega, hijo del mafioso líder petrolero, Don Carleone Romero Deschamps, le ha propuesto que sea el candidato a diputado local para que le ayude a ganar la elección municipal, ya que él participará como candidato a la presidencia y sin su ayuda no lo podrá hacer.
El caso es que el abogado González Galván quisiera impulsar a su ahijado Erasmo González Jr. pero el petrolero quiere asegurar el triunfo con su presencia y en esas anda la negociación.
El senador panista, Francisco García Cabeza de Vaca, es el dirigente del grupo de oposición al PRI que está más organizado, tiene presencia en el norte, centro y sur del estado. Sin embargo, al irse Calderón de la presidencia pudiera debilitarse porque era su principal proveedor de recursos así que en la próxima elección estará a prueba y pudiera recibir un revés, aunque habremos de estar pendientes de lo que haga o deje de hacer porque pudiera darnos una sorpresa dependiendo de los candidatos que ponga el PRI en Tampico, Madero, Victoria, Matamoros, Reynosa y Nuevo Laredo, principalmente.
Al interior del PRD en Tamaulipas no existen grupos que pudieran fortalecerlo como una organización política y sólo aparecen de sexenio en sexenio, dependiendo quien los financie y cuando han podido consolidarse a los perredistas los pierde la ambición por el poder y el dinero por lo que este partido político en el estado casi ni existe y no es un partido que sea competitivo en las elecciones.
Finalmente, existen en el estado y principalmente en Altamira y Matamoros algunos grupos que respaldados por ciertos políticos que han venido a menos, siguen “espantando al muerto” con que volverán para que el PRI estatal los tome en cuenta y les siga otorgando posiciones, cuando en realidad ya no pesan ni mucho menos cuentan con los seguidores que dicen tener en el escenario político.
De tal manera que estos mismos grupos se han convertido en un verdadero mito y buscan en cada una de las elecciones seguir espantando al priismo con que moverán a los electores para que los apoyen, pero en realidad, ya no pesan y esto los ha convertido en una verdadera ficción política.
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