Estos dos panistas llevan como adversarios a los priistas Alejandro Guevara Cobos y Pepe Rábago Castillo, quienes tienen suficiente experiencia política y también legislativa. Alejandro ya fue diputado federal y Rábago local; cuentan con un amplio trabajo político dentro de las filas del tricolor y por esto se supone que deben ganar sin mayores problemas.
Sin embargo, todo parece indicar que Guevara Cobos perderá la elección porque en el Mante y la Zona Cañera, que es la zona del distrito electoral número 6 donde se concentra el mayor número de electores, no lo quieren porque su trato es falso, superficial y saben -por experiencia- que tiene doble cara.
Además, Sergio Guajardo Maldonado, el suplente de lujo que le pusieron, no le podrá ayudar a ganar la elección porque el problema es la actitud de perdonavidas y sabelotodo que Alejandro tiene y eso pues no le ayuda en nada. Es más, nos dicen que nadie le puede sugerir algo porque se siente bordado por la mano de Dios y eso le costará su fracaso, aunque lo haya impuesto su poderoso padrino que no es precisamente Roberto Madrazo Pintado.
Por otra parte, el profesor Enrique Meléndez, de Nueva Alianza, es el candidato a vencer en este distrito electoral porque tiene una mayor presencia -ya ganó la diputación federal por el PRI- y es bien visto por los electores de los 17 municipios que componen esta zona electoral.
En lo que respecta al distrito de Tampico, Pepe Rábago Castillo perderá la elección con la panista Hilda Gómez porque no era el candidato que los priistas querían. El bueno era Fernando Azcárraga López, pero como el Negro Gamundi le tiene miedo para la sucesión gubernamental no le dieron la candidatura. Así que impusieron a Rábago y éste sufrirá las consecuencias. Ni modo. Los caprichos del poder tienen su costo y la derrota es uno de ellos.
Por otra parte, el deficiente desempeño que realiza Oscar Pérez Inguanzo al frente de la alcaldía porteña deja mucho que desear y su administración ha sido un completo fracaso. Tiene una mala relación con el sindicato de ayuntamiento, con los grupos de poder locales y todos en Tampico saben que sus amigos son los beneficiarios directos de las obras y compras que realiza el gobierno municipal y también que nomás se la pasa arreglando su rancho con los recursos públicos.
Así que eso al final de cuentas perjudicará a Pepe Rábago Castillo pero, bueno, él no tiene la culpa sino quien lo impuso. Así de simple.
En fin, el alcalde de Mante, Héctor López, ya lo había adelantado y en corto con su gente de confianza había dicho: ojalá que el candidato sea uno de acá, del Mante, porque si nos trae a uno que no sea de aquí, vamos a tener que batallar mucho para hacerlo ganar… y que le van poniendo a Guevara Cobos. ¿Cómo la ven?
Por cierto, el fracaso que los operadores del PRI tuvieron en la zona cañera donde les volvió a ganar el Truco Verástegui será un factor que les costará mucho en la elección federal. Buena ayuda le dieron al candidato priista. ¡Qué bárbaros! Con esos amigos no se necesitan enemigos.
Para finalizar, me dicen que a Oscar Luebbert si le interesa que Everardo Villarreal y Edgardo Melhem ganen la elección federal porque Cabeza de Vaca será el coordinador “camuflajeado” de la campaña de Gerardo Peña y JR Gómez, y con el triunfo electoral de los priistas le estaría dando una lección de cómo hacer bien las campañas políticas. ¿Será? Quién sabe porque aún no podemos explicarnos por qué las demandas contra Cabeza de Vaca no han prosperado. ¿No será que están arreglados y nosotros nomás somos sus porristas? ¿Usted qué opina?
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