La última vez que lo vieron estaba en un teléfono público gritando que si los priistas le hubieran dado los 15 millones de pesos que utilizaron el día de la elección para movilizar a sus militantes, él se hubiera dejado ganar fácilmente.
Y es que comenta que sus negocios se encuentran en crisis económica porque los descuidó más de dos meses por andar metido en la campaña y que será muy difícil recuperarlos.
¿Y si hubiera ganado? ¿Qué tal, eh? De seguro ni siquiera lloraría por todo lo que se gastó. ¿O sí?
Pero bueno, estas expresiones un tanto fuera de la realidad, fueron soltadas sin ton ni y nos confirman que Héctor Marón nunca estuvo preparado para ser oposición, es más, estamos casi seguros que su incursión en la política será su debut y despedida, a menos que busque sacarse la espina en el 2010, aunque no sabemos si le habrán quedado ganas. ¿Cómo la ven?
Por cierto, ya que hablamos de panistas, nos confirman que Lorelí Mendoza perdió arrolladoramente frente al priista Javier Gil Ortiz, porque no quiso el apoyo de los panistas tradicionales del distrito siete.
Aunque sabemos que ella no tuvo la culpa porque nos informan que esta decisión fue la orden que recibió del centro del país, y que se la dio el asesor gordo y gritón de Veracruz que le enviaron. Ahora nada más nos faltaría saber si le quedaron ganas de seguir participando después de haber sufrido su primera derrota electoral.
Esto nos recuerda que el diputado Lupe González Galván aprovecha cualquier invitación de boda, bautizo, quince años, inauguración de obras, reuniones de café, etc., para promoverse entre los maderenses para que le den su apoyo político y buscar por tercera ocasión la candidatura a la alcaldía de Madero. ¡Órales!
Sin embargo, el activismo de Lupe nos dicen que es para promover indirectamente a su delfín, Erasmo González, ya que si lo paran de Victoria les va a sugerir que pongan a su muchacho como candidato a la alcaldía maderense. Ni más ni menos.
Para finalizar, ya supimos que Rodrigo Medina, próximo gobernador de Nuevo León, ofreció un desayuno a sus colaboradores y amigos más cercanos un día después del triunfo.
Que ahí estuvieron los elegidos, los chidos, los chipocludos y entre ellos estuvieron tres tamaulipecos y uno de ellos fue el Chato Azcárraga. Ni más ni menos. ¿Qué les parece?
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