lunes, 29 de noviembre de 2010

Lo que entro, salió...

Del mensaje sobre el sexto informe de gobierno que Eugenio Hernández Flores presentó ante el Congreso de Tamaulipas, rescatamos tres aspectos que abordó con cierto detenimiento y en el futuro inmediato pueden ser los más interesantes para analizar debido a la importancia que tienen para muchos tamaulipecos.


Uno. El gobernador Geño Hernández le entregó al diputado Negro Gamundi una caja llena de "papeles" que demuestran, peso a peso, según dijo, en qué fueron invertidos los seis mil millones de pesos que el Congreso le autorizó a pedir prestados, y nos queda claro que esto lo hizo -con mucho tino- para despejar cualquier duda, sospecha, señalamiento y habladuría que pudieran surgir ahora que se vaya de vacaciones permanentes.

Cabe señalar que este dinero se pidió para aplicarlo en el Programa Estatal de Infraestructura 2010, y nos informó que el 98 por ciento de las acciones que se contemplaban se han cumplido, con lo cual se demuestra de alguna manera este dinero se aplicó debidamente. ¿Sera? ya lo veremos.

Dos. Se informó que el Megaproyecto Turístico “Costa Lora” está listo para concluirse en los próximos años, pero antes sería bueno investigar si el gobernador electo Egidio Torre Cantú lo tiene contemplado como una de sus prioridades para el futuro, o si el gobierno de Calderón aún lo mantiene como proyecto viable.

Y es que dicho proyecto turístico perdió cierto interés al salir Miguel Ángel Gómez Mont Urueta de FONATUR, quien era uno de los principales promotores que tenía a nivel federal, y ahora con la salida de Geño Hernández del gobierno pudiera simplemente desaparecer porque más bien fue un capricho que nunca se cumplió ni se cumplirá.
Y tres. Se dio a conocer que del total de policías que existen en Tamaulipas se han dado de baja a más del 42 por ciento debido a múltiples problemas que han tenido al transgredir las reglas que los rigen, y esto sin duda es bueno para las corporaciones de Seguridad Pública, porque se depuran a los malos elementos pero no sabemos si estos mismos se han incorporado a las filas de la delincuencia, ya que no se tiene un seguimiento puntual sobre su paradero. ¿O si?

En fin, existen otros temas de interés que desde luego abordaremos posteriormente, como el de las finanzas sanas y fuertes que dejarán al nuevo gobierno estatal. Ya Standard and Poors califica a Tamaulipas como uno de los cinco estados a nivel nacional, que tiene un excelente manejo en sus finanzas públicas y esto nos demuestra que todo lo que entró a las arcas del estado, salió pero bien invertido aunque no sabemos todavía -a ciencia cierta- quienes fueron los ganones. ¿Cómo la ven?

Para finalizar, les comentamos que los ex gobernadores Enrique Cárdenas González, Manuel Cavazos Lerma y Tomás Yarrington Ruvalcaba estuvieron presentes en el informe pero este último fue uno de los primeros en salir del recinto legislativo, y dicen que lo hizo para evitar el tráfico en el aeropuerto ya que tenía prisa por llegar a la Isla del Padre. ¿Qué tal?

Que el gobernador electo, Egidio Torre Cantú, antes de ingresar al Congreso, fue detenido unos segundos por la raza de los medios de comunicación y lo asediaron con una serie de preguntas, pero se zafo hábilmente y les dijo casi gritando, ¡aguanten!… ¡falta tiempo!... así que los nombres de quienes integrarán su próximo gabinete continuarán circulando sin sustento por los pasillos del poder.

Por cierto, se vio a Manuel Muñoz Cano muy tranquilo y relajado como que ya sabe algo sobre su destino pero no lo quiere soltar. No vimos a Toño Martínez Torres y esto dio tema para elaborar una serie de hipótesis sobre su futuro político inmediato. Dicen que se cree bordado por la mano de Dios y esto le puede costar que lo tumben del pedestal que él solititito se ha construido.

Por otro lado, Jorge Tinajero estuvo como siempre muy pendiente de la llegada de Egidio Torre Cantú y nunca perdió ningún detalle de lo que se le pudiera ofrecer, así que su eficiencia le garantiza continuar dentro del proyecto y con alguna nueva comisión. Ni más ni menos.

Antes de irnos, ya trascendió que el alcalde electo de Madero, Jaime Turrubiates Solís, recien compró un avión de un millón y medio de dólares y nos dicen que lo hizo antes de tomar posesión para que luego las malas lenguas de las buenas conciencias no suelten su veneno y empañen el trabajo que realizará al frente de la presidencia municipal. ¿Será?

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