lunes, 12 de octubre de 2009

El Negro quiere, pero no se abre

El dirigente estatal del PRI, Ricardo “El Negro” Gamundi busca acercarse a Reynosa como candidato del tricolor a la presidencia municipal y esto lo demuestra con su presencia en la Asamblea del Sindicato de Electricistas donde no tenía nada qué hacer porque el pretexto de la credencial le quedó muy pequeño y no supo justificar, bien a bien, qué hacía en ese lugar.

Y luego, estuvo presente en la cena que tuvieron sus adversarios Esiquio Reséndez Cantú, Raúl Jiménez Cárdenas y Pepe Elías Leal, quienes se reunieron para establecer una buena comunicación y evitar con tiempo alguna fricción que podría surgir en el proceso rumbo a la candidatura a la Alcaldía y esto suena bien pero lo mejor es que acordaron unir sus fuerzas con el que salga designado como candidato y con ello el priismo de Reynosa se mantendría unido.

Y bueno, ya que hablamos del Negro les comentamos que muchos de sus seguidores creen que tiene posibilidades para ganar la alcaldía de su pueblo adoptivo pero esto se duda por tres razones:

Una. Tiene muchos años fuera del municipio y pocos ciudadanos lo conocen como reynosense y cuando lo ven, creen que es un veracruzano recién llegado a la ciudad.

Dos. No es el candidato ideal que Oscar Luebbert Gutiérrez quisiera porque se cree que lo mandan a perder en una negociación política de muy alto nivel así como le hicieron con el Bético Valdez cuando perdió con Cabeza de Vaca.

Tres. No es lo mismo ser cocinero que mesero. O barman que cliente. Esto el Negro lo sabe muy bien y ahora se conoce que sus enemigos, que no son poco, se están alistando para ir contra él en la elección del 2010 en caso de que sea candidato a la presidencia en Reynosa. ¿Cómo la ven?

En fin, si el PRI pone al Negro en Reynosa, su triunfo estaría aún por verse porque los factores de poder real no están completamente convencidos que él los puede representar en el gobierno municipal, así que aún faltan muchas horas de negociación y le urge un operador que se los concilie ya que Pepe Elías Leal tiró la toalla porque el diputado también tiene muchas posibilidades de ser el bueno. ¿O no?

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