Cuando Jorge Álvarez Máynez quiso entrar al Instituto Nacional Electoral (INE) a registrarse como candidato a la presidencia de la República por Movimiento Ciudadano los guardias lo detuvieron, le pidieron su identificación y le preguntaron a quién iba a ver y para que lo buscaba. Nunca lo reconocieron.Estaba buscando su credencial y explicándoles a lo que iba, cuando alguien de su comitiva al darse cuenta de lo que estaba pasando se acercó a los guardias, les dio santo y seña de quién y sólo así lo dejaron pasar.
Este incomodo incidente que a Jorge Álvarez Máynez le sucedió, es una gran lección para los dirigentes de los partidos políticos, ya que demuestran su falta de visión política para elegir a sus candidatos y muchas veces privilegian a sus familiares, amigos, cómplices y amantes, con una candidatura, pero luego la gente ni siquiera los conoce y eso los lleva al fracaso.
Aunque esto no es el caso de Álvarez Máynez, este simple suceso sirve para que los dirigentes partidistas tomen conciencia que deben elegir candidatos que, al menos, la gente los reconozca, que sepa quiénes son, para que después, de ser elegidos les exijan o demanden los compromisos que hicieron cuando les pidieron el voto.
De otra manera es imposible verlos, se van alejando de sus compromisos con la sociedad, desaparecen del escenario y los ciudadanos los vuelven a ver sólo cuando salen de nuevo a pedirles el voto y así, hasta el infinito.
Comentamos sobre este suceso porque en los próximos días los partidos políticos en Tamaulipas darán a conocer a sus candidatos a las presidencias municipales y a las diputaciones locales y es importante que tomen en cuenta el principal requisito de todo aquel que aspira a representar a la sociedad: que los ciudadanos sepan quién es y los reconozcan.
Es necesario que los candidatos sean de carne y hueso, no surgidos en las redes sociales, porque no es lo mismo tener miles o millones de seguidores que tener la confianza de los electores.
Quienes han pasado por esta experiencia lo saben y reconocen que lo ideal es ir a territorio y ver en vivo a las gentes, platicar con todos, porque después de los recorridos por las calles, brechas y caminos, ni las redes sociales son necesarias.
Por cierto, ya que hablamos sobre Álvarez Máynez el candidato presidencial de Movimiento Ciudadano, este partido en Tamaulipas tiene la valiosa oportunidad de elegir candidatos cercanos al Pueblo y lograr una gran votación que lo perfile como la segunda fuerza electoral.
Existen coyunturas en algunos municipios como en Nuevo Laredo, Reynosa, Río Bravo, San Fernando, Ciudad Victoria, El Mante Altamira y Ciudad Madero, que deben aprovechar y por ejemplo en este último municipio MC tienen a René Razo, empresario, petrolero de vida y corazón, cercano a la gente y benefactor de la salud de cientos de personas que apoya sin tener ningún interés.
Sin duda que René Razo sería la mejor propuesta para la alcaldía por parte de MC en Ciudad Madero, aunque aún tiene que enfrentar las intrigas, calumnias y amenazas de gente perversa que sólo buscan afectar su limpia carrera política y detener el avance que MC tiene en este municipio.
En fin, los dirigentes de los partidos no solo deben elegir personas reconocidas por los ciudadanos, sino también que estén dispuesto a dar su tiempo para ir hasta donde están los electores y escucharlos, así como también, estar muy alerta para evitar que gane la intriga y la calumnia en una noble actividad como es la política.
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