martes, 11 de enero de 2011

¡No… Luque no, por favor!

El ingeniero Diódoro Guerra Rodríguez, Secretario de Educación de Tamaulipas, expresó de manera elegante y diplomática que si hubo un problema de comunicación con la dirigencia de la Sección 30 del SNTE esa situación ya fue superada. ¿Qué tal?


Pero bueno, la rebeldía que mostraron los maestros de la Sección 30 del SNTE por los nombramientos que hizo el gobierno de Tamaulipas en la Secretaria de Educación quedó apaciguada por el momento, y don Arnulfo Rodríguez lo confirmó al decir que esta escaramuza la arreglaron directamente Doña Perpetua Gordillo y Egidio Torre Cantú.

Esto quiere decir que “Morelitos” el Secretario General de Gobierno no tuvo vela en el entierro y nos confirma que no lo quieren para resolver problemas y esto, desde luego, nos parece muy extraño. ¿O no?

En fin, el ingeniero Diódoro Guerra dijo de manera contundente para finalizar con este asunto: “De parte nuestra no hubo más que dar cumplimiento a las indicaciones del señor gobernador. Se avanzó esa primera fase de integración del equipo de trabajo, y estamos analizando trayectorias, experiencias, resultados para ir conformándolo en todas las demás áreas de responsabilidad que tiene la secretaria y donde se requieren de los mejores perfiles”.

Una pregunta: ¿Acaso Bladimir “La Cucaracha” Martínez tiene una brillante trayectoria? Si esto es así, pues, entonces muchos mapaches electorales podrían ser también secretarios de Educación.

Cambiando de tema. Con la renuncia de la diputada Lupita Flores de Suárez, a la secretaria general del PRI estatal, se inicia el proceso de cambio en este partido ya que a su vez, se está convocando a que el Consejo Político Estatal se reúna el domingo 16 de enero a las 12:00 horas de forma extraordinaria en el Polyforum de ciudad Victoria.

Esto es para elegir a los nuevos dirigentes sustitutos que habrán de concluir el periodo estatutario vigente y por lo que José Hernández Cuesta y el primo del Negro, Héctor Villegas Gamundi, secretarios de organización y de elecciones asumen “momentáneamente” de acuerdo con los estatutos los cargos de presidente y secretario general del PRI.

Por cierto, se informó que Rafael Luque Jr. entró por Jorge Vela en el área de comunicación social del PRI, pero esto más bien nos suena a una broma de mal gusto, ya que Luque “El Pelochas” a donde llega todo lo hace mal, lo destruye y lo desune.

Ahí tenemos el ejemplo del pobre Arturo Diez Gutiérrez a quien convirtió, por su excelente trabajo de comunicación social, en el peor alcalde de la historia de Victoria.

Tal es su trágico destino que parece que lo han puesto en ese lugar, como parte de una perversa estrategia política, para hacer que pierda el PRI en las próximas elecciones federales. ¡Ah raza!… ¡Qué barbaros!

Así que esperamos que cuando asuma el cargo el nuevo presidente del tricolor, ya sea Enrique o Manuel, lo corran de inmediato de ese lugar porque les traerá mala suerte, la guácala, el mal de ojo y les dará muchos problemas. Tiene malas vibras y si no lo hacen pues ni modo, ya se los dijimos y al baile vamos.

Para finalizar, por los pasillos del poder nos dicen que se eligió al viejo decrépito de don Enrique Carlos Etienne Pérez del Río, para que sea tesorero de la UAT, entre los miles de jóvenes preparados que hay en todo el estado y que están sin trabajo, solo porque buscan revivirlo a ver si agarra su quinto aire. ¿Qué tal? y bueno, pues esto aunque no nos guste tenemos que aplaudirlo por la nobleza del gesto.

Antes de irnos, En su primer acto de apoyo a la campaña del candidato de la coalición Tiempos Mejores para Guerrero, Manuel Añorve, el nuevo dirigente nacional del PRI, Humberto Moreira, llamó al priismo guerrerense a no caer en confianzas en la elección del 30 de enero próximo, pues “deben salir a votar”.

Y entre otras cosas mencionó que integrará a su equipo a ex gobernadores como Eugenio Hernández, Natividad González, Fidel Herrera, Jesús Aguilar, José Reyes Baeza, y diputadas federales como Yolanda de la Torre, de Durango; Paloma Guillén, de Tamaulipas, y Marcela Guerra, de Nuevo León. ¡Órale! No que no.

No hay comentarios:

Publicar un comentario