El presidente del Supremo Tribunal de Justicia y del Consejo de la Judicatura de Tamaulipas, Alejandro Etienne Llano, es un jurisconsulto muy optimista porque afirma que en el estado no hay jueces corruptos.
Esto realmente nadie se lo cree, porque sería como pensar que los agentes del ministerio público, la policía y los tránsitos ejercen libremente sus funciones sin estar presionados por fuerzas extrañas y ajenas a su desempeño.
Lo que si creemos es que el Supremo Tribunal y la Judicatura del estado están haciendo un gran esfuerzo para evitar que la tentaciones de diversa índole y origen se presenten con más frecuencia en estas dos instituciones judiciales.
Y es que el proceso de supervisión del trabajo que los jueces realizan, se encuentra en constante vigilancia porque está basado en visitas periódicas a los juzgados y en la revisión de los casos que analizan.
Claro que estas acciones tienen más credibilidad que la otra temeraria afirmación. Aunque comenta que los principales vigilantes del desempeño de los jueces son los propios interesados y asegura, que si tienen alguna queja pueden acudir al pleno del consejo, para que se hagan las investigaciones del caso a tratar.
Esta es una excelente invitación y oportunidad para que los ciudadanos colaboren con las autoridades y así transparenten su trabajo en bien de la sociedad. Sin embargo, el ambiente no está para ponerle el dedo a los polis, tránsitos, ministerios públicos o jueces, así que este llamado estamos casi seguros que se quedará sin eco en la sociedad.
En fin, la actitud llena de optimismo del presidente del Supremo Tribunal de Justicia y del Consejo de la Judicatura de Tamaulipas, Alejandro Etienne Llano es muy positiva y es una buena señal porque ahora sabemos que nuestras autoridades judiciales trabajan para tratar de limpiar la mala imagen que tienen, pero la empaña al afirmar contundentemente que no existe corrupción en el sistema y con ello pierde credibilidad por andar diciendo mentiras. Así de simple.
Por cierto, si usted a un Juez le quiere poner el dedo por cualquier irregularidad que haya notado en su desempeño, aquí le pasamos un teléfono gratuito para que lo denuncie 01 800 007 37 37, y esperamos que le sirva de algo, pero lo mejor es que no se meta en problemas, y se conduzca siempre con respeto hacia los demás. ¿Cómo la ven?
Para finalizar, la Isla Navidad, esa que compró el ex gobernador de Nuevo León Natividad González Parás allá en el Caribe mexicano está provocando muchos comentarios adversos entre los habitantes de Cancún por las interminables bacanales y orgías que la pandilla de Geño Hernández Flores organiza desde que llegó a ese hermoso lugar de aguas cristalinas y color turquesa. ¿Qué les parece?
Los locales de aquel lugar, dicen que Geño pareciera que es socio de Nati, ya que dura varios días encerrado en esa isla y no lo dudamos ni tantito porque son políticos muy emprendedores y exitosos. Saben utilizar muy bien la impunidad que da el poder, y los recursos públicos para hacer grandes negocios. Ni más ni menos.
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