El hijo del diputado Pepe Rábago Castillo un tal Alejandro, quien aún se mantiene dentro de las filas del PRI de Ramiro Ramos, sale ahora con el cuento chino de que el tricolor perdió seis de las ocho diputaciones federales, porque los promovidos fueron pura simulación, ya que los promotores del voto llenaron los formatos al ahí se va, y estos mismos promotores, pues claro que no trabajaron a favor del priismo y mucho menos por sus candidatos. ¡Qué bárbaros!
Sin embargo, nosotros agregaríamos que Rabaguito y sus compinches, esos estrategas de la política que lo acompañan y le echan porras, para que no se desanime o se sienta angustiado o deprimido por la magna-derrota electoral, simplemente no trabajaron con la estructura que supuestamente formaron para la movilización electoral, es más, si acaso ésta existió algún día, ellos nunca la capacitaron y si esperaban activarla con un simple llamado por teléfono pues se equivocaron, y esto provocó -desde luego- que cientos o miles -no lo sabemos aún- de votos fueran anulados.
Así que ese fue uno de los detalles importantes que a Rabaguito se le pasó comentar a los miembros distinguidos de la Fundación Colosio, y no lo hizo porque sabemos que este pormenor lo involucra directamente con esta responsabilidad, y si tuviera un poco de dignidad y vergüenza partidista, ya se hubiera ido del PRI como lo hizo su líder político Lucino Cervantes Durán.
Ojalá que Ramiro Ramos se dé cuenta muy pronto que no es necesario aplicar una evaluación para conocer la eficiencia y eficacia, de los miembros del Comité priista de Lucino, no necesita ningún método, ni siquiera formato alguno para hacerlo, ni mucho menos requiere contratar alguna consultoría para que venga a preguntarles en qué fallaron, y cuáles son sus justificaciones de la derrota.
No, Ramiro como prueba fundamental de su ineficiencia, irresponsabilidad, ineficacia y falta de conocimiento electoral y político, tiene en sus manos los resultados de la elección federal y con eso basta y sobra para que a todo el comité que acompañó a Lucino en esa aventura política, sean corridos de inmediato del PRI de Tamaulipas, porque los resultados electorales son más que una prueba para medir los alcances, sus capacidades y fortalezas que tuvieron a la hora de la verdad.
Cambiando de tema. El constructor Lalo Pérez ya expresó que desea participar en las próximas elecciones como candidato del PRI a la presidencia municipal de Altamira. Es amigo de Oscar Lacio y no sabemos si este destape sea parte de alguna artimaña para ir presionando a la dirigencia priista y se defina pronto sobre esta situación, o bien, presionar al grupo de Javier Gil quienes ya se agrupan alrededor del Diputado Armando López, quien también pretende esta posición electoral, y para sorpresa de muchos, ha trascendido que su colega la legisladora Griselda Carrillo Reyes, ya le dio su apoyo porque en esta ocasión no buscará ser candidata a la alcaldía. ¿Qué les parece?
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