No obstante, estos tres priistas están conscientes que primero tendrán que ganar la elección federal, para poder aspirar por la candidatura al gobierno estatal, ya que si pierden estarán descartados para luchar por esa posición. Así de simple.
Por lo pronto, sabemos que Rodolfo Torre Cantú y Baltazar Hinojosa Ochoa en las encuestas y evaluaciones que el PRI estatal realiza semanalmente salen bien calificados y esto les garantiza -hasta cierto punto- el triunfo electoral, y que su aspiración por la gubernatura se mantenga.
En cambio, Javier Gil Ortiz anda muy presionado porque ya no sabe qué hacer para tratar de ganarse el apoyo de los electores en su distrito. Y es que cuando fue Alcalde de Altamira -por su carácter- tuvo muchos problemas para gobernar, ya que no tiene el suficiente aguante para tratar con la gente y mucho menos, esta capacitado para el servicio público ya que su vida profesional siempre la realizó en la iniciativa privada.
Pero bueno, ante eso no se puede hacer nada ya que su candidatura fue hasta donde sabemos, un capricho del poder y si pierde por segunda ocasión la diputación federal, esta derrota representará ahora sí su tumba política. Ni más ni menos.
Por otra parte, nos dicen que a Rodolfo Torre le falta que lo asesoren en el discurso y que le den elementos suficientes para debatir, porque en la pasada reunión con la COPARMEX de Victoria sus adversarios se vieron mejor plantados que el y si pretende volar más alto tendrá que prepararse mejor.
En fin, conforme pasan los días el interés por las campañas a la diputación federal se va perdiendo en Tamaulipas porque en puerta tenemos las locales y la presencia de los precandidatos al gobierno estatal que vienen de México, como Marco Antonio Bernal Gutiérrez y Cruz López Aguilar le meten mucho ruido a las federales. ¿O no?
Para finalizar, anoche la CANACO de Victoria organizó la tradicional cena para entregar el premio al empresario del año. Se invitó -como siempre- a las autoridades municipales y del gobierno estatal pero trascendió que el Alcalde, Arturo Diez Gutiérrez, no asistió porque tiene pleito casado con el dirigente de la CANACO, Juan Carlos González Salum y mejor se fue a la fiesta de graduación de la hija del gobernador quien es su ahijada consentida. ¿Cómo la ven?
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