martes, 5 de abril de 2011

No existen partidos ni ciudadanos

Con cierta insistencia hemos señalado que el sistema de partidos en el país ya no funciona. Que nadie cree ni confía en los políticos y que las instituciones electorales como el TRIFE, sirven para aparentar que existe una supuesta justicia electoral, pero no sirve de nada, porque sólo defiende los intereses de los grupos en el poder.


Que más bien los concesionarios de estas organizaciones forman una especie de Sociedad Anónima, la cual está formada por el PAN, PRI y PRD hasta el momento. Que el gran negocio que se comparten son los gobiernos, y el país es un activo fijo y con él pueden hacer lo que quieran. Por supuesto que la democracia y los ciudadanos en este esquema empresarial no existen. Todo es invisible.
 Tienen controlada la justicia, las leyes y los impuestos los utilizan para sus gastos y para mejorar un poco la infraestructura urbana, carretera, de salud y educativa. Pero la verdad, un proyecto de gobierno con visión de futuro que garantice un mejor desarrollo para el país, no tienen, ni lo quieren diseñar porque les arruinaría el negocio.

Por ello, con toda confianza actúan impunemente y hacen con los recursos públicos lo que quieren, y aplican el rigor de la ley a quienes afectan sus intereses sin importarles, las consecuencias que tendrán en el futuro.

Los legisladores, quienes deberían representar los intereses de los ciudadanos no lo hacen porque son parte de esta Sociedad Anónima, y los congresos se han convertido en una especie de Juntas de Administración de negocios.

Esto ha quedado confirmado con los nuevos cables de Wikileaks que La Jornada divulgó este lunes, y los cuales señalan que “en 2006 tanto el candidato del PRI a la presidencia, Roberto Madrazo Pintado, como la mayor parte de los gobernadores priistas, abdicaron un mes antes de la elección con el fin de apoyar a Calderón”.

La idea de que los gobernadores del PRI apoyaran a Calderón es porque él les garantizaba mayor poder y margen de acción, y en palabras de un destacado priista, asegura este cable, que “a los gobernadores del PRI les conviene la autonomía y la autoridad que han gozado bajo el gobierno de Fox, y saben que Madrazo los metería en cintura si fuera electo”.

Es decir, que “un presidente técnicamente panista era el que mejor garantizaba el predominio de los intereses, de los principales líderes priistas y la acción política de los ‘señores feudales’ en las entidades federativas”.

Por otra parte, un mes antes de las elecciones de 2006, dos figuras claves del equipo del entonces candidato Felipe Calderón como lo fueron Germán Martínez y Luisa Calderón, afirma Wikileaks, que se reunieron por separado con funcionarios de la embajada de Estados Unidos en México para asegurarles que, de ganar el panista, México sería un “socio más activo” de Washington.

De tal manera que “para lograr la mayoría en el Congreso, daba seguridades Germán Martínez a sus oyentes estadunidenses, que el PAN confiaba en obtener el apoyo de los gobernadores “jóvenes y progresistas” del PRI como: Enrique Peña Nieto (Estado de México), Eduardo Bours (Sonora) y Eugenio Hernández (Tamaulipas)”.

Después de conocer estos cables confirmamos lo que hemos venido diciendo, y ahora no sabemos cómo le va a hacer el dirigente del PRI, Humberto Moreira, para convencer a los mexicanos de que son la mejor opción, si como hemos visto, a los priistas lo que les conviene es que el PRI pierda las elecciones.

Ahora entendemos por qué varios ex gobernadores del tricolor que apoyaron a Calderón para que ganara la presidencia hicieron con los recursos federales lo que quisieron y endeudaron sus estados, y es que sabían que nadie los iba cuestionar en dónde los aplicaron y cuál fue su destino. Tales son los casos de Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas, Veracruz y Quintana Roo, entre otros más.

En fin, los cables de Wikileaks han provocado en los Estados Unidos una serie de renuncias en los primeros niveles del gobierno, y aquí en México tuvo que renunciar su embajador porque en uno de esos cables criticó duramente a Calderón y a los panistas. Sin embargo, en el PRI se espera que no pase nada. Seguro que Moreira dirá que es un ataque desesperado de Gadafi, consecuencias de la radiación que el Tsunami del Japón provocó o simplemente que son ataques de sus adversarios. Jajaja pero ¿cuáles?

Así que una vez más queda demostrado que el sistema de partidos no existe. Que urge una Reforma de Estado para que incorporen a las elecciones las candidaturas ciudadanas porque esta Sociedad Anónima que está representada por el PAN, PRI y PRD ya se agotó, y México necesita de otro sistema democrático. Que le devuelva a la política la credibilidad perdida. Ni más ni menos.

Para finalizar, sorprende que al contador Miguel Salman Álvarez lo propongan como Auditor Superior cuando en el sexenio de Geño Hernández Flores lo corrieron de la subsecretaría de Ingresos. ¿Será que ahora sí la diputada Lupita Flores quiere revisar bien las cuentas públicas? Pues si esto es así, a Oscar Pérez Inguanzo ya le volvió a dar chorrillo y quien sabe a cuántos ex alcaldes más. ¿Cómo la ven?

Antes de irnos, nos informan que Humberto Moreira, líder del PRI, organizó con urgencia una comida con los 19 gobernadores del tricolor, los coordinadores parlamentarios y los líderes de sectores, para ponerse de acuerdo cómo se van a defender de los cables que Wikileaks difundió, pero como bien dicen por ahí, “palo dado… ni Dios lo quita”. Así de simple.

No hay comentarios:

Publicar un comentario