Los datos que justifican la creación de la Comisión Nacional Anticorrupción que promueve el presidente electo, Enrique Peña Nieto, señalan que en México en los últimos 10 años creció la corrupción y la organización “Transparencia Internacional” ubica a nuestro país, en la posición número 100 de un total de 183 países, con una calificación de 3 en una escala donde 0 es la mayor y 10 la menor percepción de corrupción.
Por ello, para Peña Nieto este es uno de los temas que representan uno de los mayores desafíos el cual tendrá que enfrentar en su sexenio, y aunque no pretende erradicarlo para siempre porque esto sería una ilusión, sí prevé crear un sistema de controles más eficaces que permita la transformación integral del proceso de rendición de cuentas y el combate a la corrupción.
Esta propuesta peñista establece crear un órgano autónomo con facultades de investigación similares a las del Ministerio Público, para actuar por medio de alguna denuncia o por oficio y entre sus obligaciones estará el actuar con discreción y mantener el anonimato de los denunciantes.
Sin duda que al aprobarse esta iniciativa anticorrupción de inmediato se inhibirán las acciones irregulares que se presentan dentro de los distintos niveles de gobierno, ya que todo indica que ahora sí el PRI va contra los corruptos y no se va a tolerar que entre los mexicanos siga creciendo la percepción de que su lucha contra la corrupción es ineficaz.
Finalmente, esta iniciativa peñista plantea reformas a nueve artículos constitucionales, en los que se determina que en el ámbito administrativo la comisión podrá investigar y sancionar a los servidores públicos que formen parte de los poderes de la Unión, así como de los organismos autónomos, empresas, fideicomisos y toda aquella institución -gobiernos estatales y municipales- que ejerza recursos públicos de índole federal.
Cambiando de tema. El dirigente estatal del PRI, Ramiro Ramos Salinas, dio a conocer que Héctor V. Gamundi, primo hermano del Negro será por segunda ocasión secretario de acción electoral y esto nos confirma que Ricardo Gamundi Rosas, quien se encuentra actualmente huyendo de la justicia, sigue vigente y continúa manipulando la política en Tamaulipas.
Dice Ramiro Ramos que el primo de este delincuente llega otra vez al Comité Directivo Estatal porque tiene 18 años de experiencia, mismos que adquirió estando a lado del Negro quien es su jefe, tutor y guía espiritual.
Sin embargo, estos años de experiencia electoral no garantizan el triunfo, ya que su primo El Negro utilizaba suficientes recursos para comprar el voto, manejaba la amenaza y el chantaje para someter a quienes se oponían a sus caprichos políticos.
Por ello, el trabajo que pueda hacer el primo del Negro ese tal Héctor, será muy poco, y sus resultados no se verán como antes, ya que las condiciones en que ahora se construye el PRI de Ramiro son en un ambiente de democracia y transparencia política y esto realmente lo desconoce. ¿Verdad?
Pero bueno, con la presencia de algunos gamunistas en la estructura del gobierno estatal, era inminente que El Negro Gamundi empezaría a operar para irse apoderando de los principales espacios donde se decide el rumbo de la política estatal, y el arribo de su primo Héctor V. Gamundi al PRI de Ramiro Ramos lo confirman. ¿Qué tal, eh? ¿Pos no que éramos diferentes a los que se fueron? ¿Será este el nuevo PRI del que tanto habla Enrique Peña Nieto y su grupo?
Vaya usted a saber, pero eso sí, los que se fueron nunca lo han hecho realmente. Esto ahora se comprueba y de igual manera, también con la llegada del primo del Negro, sabemos que sus espías siguen incrustados en la burocracia estatal y continúan trabajando lo cual genera entre los ciudadanos desconfianza, porque los que se fueron dejaron sin recursos al gobierno, con una vida transitando en los extremos y sin que nadie les hiciera absolutamente nada.
Por cierto, ha trascendido que el hijo de Pepe Rábago Castillo, un tipo de nombre Alejandro, se quedará en la secretaria de operación política del PRI para siga aprendiendo en la derrota, porque como bien se sabe, echando a perder se aprende y con el junior de Rábago en esta posición partidista este partido político tiene muy pocas posibilidades de ganar en la próxima elección local. Así que esto anuncia una posible desbandada entre sus filas porque no se han podido renovar y desde luego a nadie le gusta perder. Ni más ni menos.
Para finalizar, Miguel Gómez Orta, el amigo que niega Miguel Manzur Nader pero que sí es empleado de Javier Gil Ortiz, puso en circulación miles de calcomanías en Altamira con su nombre para promoverse como posible candidato del PRI a la presidencia municipal. Así que el grupo de Gil y la gente del pasado reciente, que andan huyendo por España, ya iniciaron su lucha política por seguir en la política y esperamos que la justicia no les dé un revés porque sería muy dramático para sus aspiraciones.
Al cierre. ¿Será cierto que Oscar Pérez Inguanzo, este ladrón de siete suelas que robo al municipio de Tampico, saldrá en los próximos días del hospital para irse tranquilamente a su casa? Si esto es así, vamos de mal en peor y todo indica que el pasado regresa fortalecido. ¡Quihuboles! No cabe duda que los muertos en la política siempre están más vivos que nunca, y lo que se diga demás, es puro cuento chino. ¿O no?
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