Mónica y Pepo desesperados

La panista Mónica Villarreal Anaya estuvo presente en la gira que hace unos días el gobernador, Egidio Torre Cantú, realizó por Tampico y se comenta que subió al autobús oficial en una parte del recorrido por el puerto.

Dicen que la hija del ex gobernador Américo Villarreal Guerra buscó al mandatario estatal, para expresarle su deseo de ser la dirigente del PRI en Tampico, o bien la candidata a la diputación local por este partido, pero actualmente trabaja en el gobierno panista de Magdalena Peraza Guerra, y esto a los priistas porteños no les gusta.

Así que Mónica quiere que el ingeniero Egidio Torre Cantú borre esta mancha azul de su curriculum, utilizando el poder absoluto que le confiere el designio de ser el Jefe Supremo del priismo tamaulipeco, y es posible que lo haga, de eso nadie tiene la menor duda y sería como darle su bendición política para que sea nuevamente priista. Así de simple.

Sin embargo, lo que este poder absoluto no puede concederle a Mónica, es que los priistas de Tampico le vuelvan a tener confianza y credibilidad, y eso complica su situación, ya todos saben que trabaja en el municipio como subdirectora y secretaria técnica de la Junta Municipal de Catastro, y eso de un plumazo o diciendo las palabras mágicas o benditas no se puede borrar así no más porque sí.

Y es que en el puerto se comenta que Villarreal Anaya le aceptó a la alcaldesa el trabajo, porque pretextaba haberse quedado sin chamba en el gobierno estatal, y no tuvo más que aceptar lo que se le ofrecía aunque se sabe que la maestra de igual manera invitó a otras priistas a colaborar en su gobierno, pero tuvieron más dignidad, fortaleza y militancia priista para agradecerle la invitación y no aceptar.

El caso es que la posición de Mónica le mete mucho ruido a la cúpula del Poder y del PRI en estado porque no saben qué decisión tomar. Por eso la diputada Griselda Carrillo Reyes, como delegada del tricolor en Tampico, debería platicar con los líderes del priismo porteño para saber si realmente la hija de Américo, por su incursión en las filas del PAN no les causaría daño a la hora que regrese al PRI aunque de antemano ya sabemos que la militancia la aborrece por su debilitad política.

Pero bueno, esto mismo pasa con Pepo Mathieu quien anda desatado atacando a la alcaldesa Magdalena Peraza Guerra y no sabe que ella misma le dio a conocer al gobernador lo que anda diciendo de los regidores priistas cuando no le reviran en las sesiones del Cabildo, y lo que pasa es que existe un pacto de no agresión establecido por el gober y es muy lamentable que esto no lo sepa el dirigente municipal del tricolor.

Esto quiere decir que Pepo esta fuera de la jugada y cree que atacando a la alcaldesa y cuestionando a los regidores priistas pudiera quedarse en la dirigencia del PRI pero esto no es así, ya que una de las demandas que con más insistencia le hicieron a Ramiro Ramos Salinas, dirigente del PRI en el estado, cuando realizó su gira por Tampico es la exigencia de la salida de Pepo Mathieu porque para esto de dirigir el tricolor municipal no más no funcionó.

Y por ello, Fernando Azcárraga López ni siquiera lo tomó en cuenta en su manejo de la campaña política porque sabe muy bien que Pepo para esto de las elecciones lo único que sabe es votar y eso porque en la casilla se lo dicen y sabía que más que nada esa posición la tenía por afectos que por su experiencia política. Ni más ni menos.

En fin, la actitud que Mónica y Pepo muestran tiene mucho que ver con la falta de experiencia, poca credibilidad, y falta de confianza pero sobre todo, tiene que ver mucho con su desesperación. Y no es que actúen de mala fe, sino que no pueden entender que los errores en la política tienen un costo, y ahora lo tendrán que pagar. Por ello, deseamos que Tomás Moro, el santo patrono de los gobernantes y políticos, los ilumine en su camino para que este sea menos difícil, y puedan aceptar finalmente que se equivocaron y no hay manera de regresar. Porque como bien dicen por ahí… “Palo dado ni Dios lo Quita”. ¿O sí?

Al cierre. La mano del NEGRO se hace presente en una mujer que está manejando algunos hilos del poder estatal. Por lo pronto, está a punto de meter al primo en la Secretaria de Elecciones del PRI así como lo hizo en su momento en el Congreso de Tamaulipas. De continuar por esta ruta pudiéramos volver al pasado y tenemos que recordar que este hasta la muerte le provoco al doctor. ¿Será? Al tiempo… ya lo verán.