Y es que esta Reforma Laboral también implica una reforma sindical y esto a la mayoría de los dirigentes les hace mucho ruido porque si se aprueba, sin cambios alguno, los obligaría llevar a cabo elecciones democráticas, transparentar el manejo de los recursos que reciben por las cuotas de sus compañeros, y además, ofrecerles una periódica y clara rendición de cuentas.
Por ello, los caciques obreros se mueven de manera inusitada en el escenario legislativo para tratar de modificarla, y hasta cierto punto están preocupados, porque saben que si la reforma pasa sin cambios, los tumbarían de inmediato de sus dirigencias, ya que la mayoría de sus agremiados la aprovecharía para quitarlos del poder, porque los dirigentes charros prefieren la reelección, la opacidad, el dinero y el rechazo a la transparencia, que es lo que permite, a unos y a otros, perpetuarse en el cargo y disponer de las estructuras a su antojo.
Lo contradictorio de esta reforma es que el tema central, dicen algunos analistas, debería ser la mejoría y seguridad de los obreros, pero esto no es así, ya que sus dirigentes prefieren cuidar sus privilegios y continuar con las conquistas laborales -que según esto- mucho les ha costado mantener. ¿Será?
Quién sabe. Lo importante es que al fin vamos a conocer si el presidente electo Enrique Peña Nieto, prefiere mantener a la casta divina del sindicalismo nacional, en el México de los privilegios, o si los somete a la prueba de la Presidencia Democrática que tanto impulsa.
Por lo pronto, asegura que “su postura es en favor de la transparencia sindical, en un marco de respeto a la autonomía gremial.” O lo que es lo mismo, que sus senadores priistas logren alrededor de 40 cambios sobre la minuta legislativa enviada por la Cámara de Diputados, a fin de que a más tardar el 25 de octubre el pleno del Senado tenga aprobada la reforma. ¿Cómo la ven? Seguirán los caciques o se caerán de sus posiciones. Hagan sus apuestas.
Cambiando de tema. El diputado Gustavo Torres Salinas, presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso de Tamaulipas, asegura que en la revisión de las cuentas públicas se actuará en apego a la ley porque fiscalizar los recursos es una de las obligaciones que tiene el Congreso y confirma que son 250 cuentas públicas las que el Auditor Superior del estado, Miguel Salman Álvarez, envió a la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior y las cuales se están revisando como manda la ley.
Por otra parte, el diputado Torres Salinas, reconoció que existe un rezago en algunas cuentas públicas, pero aseguro que los diputados están haciendo un esfuerzo para abatirlo en la medida de lo posible. De igual manera, dijo que en caso de existir observaciones y si los Ayuntamientos no las solventan, se actuará con apego a la ley y si fueran graves podría llegarse a una sanción de tipo administrativa.
Finalmente, recordó que en el presente periodo ordinario de sesiones es cuando se recibe, analiza y se aprueba la ley de ingresos y el presupuesto de egresos que aplicará el gobierno estatal en el 2013. Así que se encuentran en espera de recibir el paquete económico que mandará la Secretaría de Finanzas.
Para finalizar, Geño no tenía ni en qué caerse muerto antes de entrar a la política. Algunos empresarios recuerdan que asistía a reuniones que la delegación de Economía organizaba para las empresas que buscaban créditos blandos. No la veía llegar. Tomás lo rescató, lo metió a la política y ahí encontró el cuerno de la abundancia. Ahora dice que podrá demostrarle a la PGR la fortuna que ganó. ¿Será? Ya lo veremos…
Al cierre. El gobierno de Aguascalientes difundió un boletín donde asegura que en la reunión que tuvo el gobernador Carlos Lozano con el ex presidente Carlos Salinas de Gortari no revisaron los perfiles de los candidatos del PRI que participarán en la elección de julio de 2013 como antes se había dicho. Que esto fue una equivocación del Coordinador de Comunicación Social y que se responsabiliza por este error. No pos si, y nosotros que se la creemos. Qué bien…
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