Everardo resuelve caso Subsemun

El Alcalde de Reynosa, Everardo Villarreal Salinas, se movió con toda rapidez y efectividad y pudo resolver en poco tiempo que el gobierno federal le envíe al municipio la segunda ministración de los recursos del Subsidio para la Seguridad Pública Municipal (Subsemun).


Declaró que la federación “había pedido al municipio la documentación sobre el incremento de los sueldos a los elementos policiacos y la parte complementaria de un deposito de tal manera que esperamos que con eso estemos totalmente liberados y con el recurso al cien por ciento”.

Así de esta manera, el alcalde Villarreal Salinas demuestra que trae bien puestas las pilas y no perderá ningún recurso por falta de trámites o aportaciones que tenga que hacer su administración, ya que los beneficios que recibirá la ciudadanía serán mayores y los recursos no se perderán por indolencia o descuido. ¿Qué tal, eh?

Cambiando de tema. Si los regidores cabecistas, Helga Ruth Vázquez Ruiz y Ricardo Villarreal Mendoza se adjudicaron el asalto a las oficinas del PAN en Victoria, la autoridad estatal puede iniciar una investigación y proceder en su contra por los daños cometidos al edificio de esa organización política.

Si no lo hace, esto va a generar una serie de cuestionamientos sobre la ingobernabilidad que en Tamaulipas se vive, y donde cualquier ciudadano con cierto poder hace lo que le da la gana. Así que esperamos que el Comité Directivo Estatal del PAN denuncie los hechos ante la Procuraduría de Tamaulipas, y solicite la intervención de la autoridad para desalojar el edificio de ese partido político.

Ya que estas violentas acciones son las que empañan el trabajo que este partido llevan a cabo para posicionarse del electorado así como la vida democrática que supuestamente gozan en su interior y como podemos observar esto no es así ya que la pandilla de Cabeza demostró en esta ocasión de lo que son capaces.

Lo mejor de todo este borlote es que Cabeza de Vaca está mostrándose tal y como es y ahora sus padrinos Gil y Mancera se darán cuenta de lo que es capaz de hacer si no le cumplen sus caprichos.

Por cierto, el jurisconsulto Morelos Canseco asegura que en Tamaulipas “nadie está al margen de la ley y nadie está por encima de la ley, cuando la Procuraduría General de Justicia es motivada para ejercer sus atribuciones de investigación ante la presunta comisión de un ilícito, debe actuar sin distingos de quien sea la persona física o moral que presente la denuncia”. Suena bien… ¿verdad?

Sin embargo, en realidad la percepción ciudadana afirma que la ley no se cumple con cabalidad porque el tiempo que vivimos no permite que se aplique, y por ello con cierta insistencia se rumora que el procurador Bolívar Hernández saldrá de esta dependencia y en su lugar pudiera entrar el abogado Francisco Cayuela, quien tiene experiencia, conocimiento y muchas tablas para manejar esa importante posición. Pero eso ya lo veremos muy pronto.

Para finalizar, Jesús de la Garza Díaz del Guante acaba de aceptar un puesto de cuarto nivel dentro de la burocracia estatal. Esto lo denigra porque después de ser Gerente General de la Junta de Aguas de Matamoros, aceptó una miserable coordinación de planeación y finanzas de la Secretaría General de Gobierno, un área donde ni siquiera se maneja dinero. O qué… ¿acaso estamos equivocados?

Antes de irnos, ha trascendido que el presidente de la Fundación Colosio, Marco Bernal Gutiérrez, está siendo grillado en las altas esferas del priismo nacional. Que el dirigente del PRI nacional, Humberto Moreira quiere cambiarlo para que en su lugar entre un peñista puro pero no lo hace porque esto le provocaría muchos problemas al interior.

Por lo pronto se vislumbra que los peñistas buscan quedarse con todo el PRI para que nadie les haga sombra. Quieren mover todo aquello que huela a Manlio Fabio Beltrones pero más vale que se la lleven tranquilos porque estos políticos -Bernal y Beltrones- que se formaron entre los dinosaurios y la política moderna de Salinas, son perversos y de un colmillo muy pero muy retorcido y les pudieran sacar un buen susto.